domingo, 20 de diciembre de 2015

Felices fiestas



Ya están aquí las fiestas de navidad. Los niños sólo piensan en que no hay cole, en Papá Noel y en los reyes. Y los mayores piensan en los preparativos de cenas y comidas, en las vacaciones, en las cartas a los reyes… Un poco más estresante para muchos, aunque al final los peques acaban contagiándote la alegría.

Y, cómo no, el fin de año. Esa noche donde ves que en tu mesa falta gente importante, aunque sabes que están ahí de una forma u otra. Y llega el momento de las uvas, donde nos felicitamos por un nuevo año y nos hacemos nuevos planes, o volvemos a repetir los no cumplidos el año pasado.

Mi deseo es el de cada año, que el nuevo sea mucho mejor que el anterior para todos. Y personalmente… pues no puedo pedir más. Sigo teniendo a  la mejor familia, que sigue creciendo y a la que se ha unido una pequeña familia más que ya se ha convertido en la mía; he recuperado mi mejor yo, tengo a mi lado a una persona maravillosa a la que no puedo querer más, tengo dos nuevas niñas a las que adoro, mis niños siguen creciendo sanos, aunque no los tenga todo lo que quisiera; sigo con trabajo…

Ya dije el año pasado que después de un 2013 para olvidar y un 2014 de cambios venía un 2015 de estabilidad. Pues así ha sido, y he recibido muchísimo más de lo que hubiera soñado. Ahora espero que este 2016 sea una continuación y se vayan poco a poco algún que otro nubarrón que aún queda.


Pues lo dicho, os deseo a todos que el 2016 sea, como mínimo, mucho mejor que el 2015.



¡FELICES FIESTAS!




jueves, 17 de diciembre de 2015

No te preocupes por mí.



Es extraño, pero no siento nada aquí. Aunque estoy preocupado por ti. Te veo cada día y, desde que me fui, no has vuelto a ser tú. Te veo triste y apagada. También te veo llorar por las noches cuando te acuestas y tocas mi lado de la cama. Incluso lloras cuando hablas de mí.

No quiero que estés así, quiero que sigas con tu vida, que recuperes esa sonrisa que me encantaba, que vuelvas a ser la persona que me enamoró de ti. Y quiero que sepas que, aunque no me veas, yo seguiré cuidándote cada día, seguiré visitándote por las noches mientras duermes y seguiré dándote los buenos días. Estaré a tu lado en todo momento y te esperaré hasta que llegue el momento de volver a estar juntos, que espero tarde mucho en llegar.

Quisiera poder decirte tantas cosas para hacer que te sientas mejor… Decirte que aunque vivimos poco tiempo juntos, lo nuestro fue maravilloso. Que no pude estar más feliz a tu lado. Que me hubiera encantado casarme contigo y llegar a viejecitos juntos. Que me diste lo que nadie me dio nunca. Que me encantaba acostarme y abrazarte, y hablar hasta que te quedabas dormida. Que me quedaba tiempo mirándote mientras dormías. Que me encantaba notar tus pies fríos buscando un sitio para calentarlos. Que despertarme por la noche porque notaba que me buscabas dormida y me abrazabas era algo increíble. Que lo primero que viera por la mañana fueran tus hermosos ojos era el mejor despertar del mundo. Que tus besos hacían que me derritiera. Que me encantaba hacerte el café y desayunar contigo…



Te dije un día que lo nuestro sería eterno y ahora te lo puedo confirmar, pues aún aquí te sigo queriendo.




lunes, 14 de diciembre de 2015

Nueve meses



Hace nueve meses comenzó la gestación de algo increíble. Mes a mes, día a día, este bebé ha ido creciendo y formándose, convirtiéndose en algo tan especial que es difícil de explicar. Me has dado tanto en estos nueve meses que no sé si te lo podré devolver, aunque puedes estar segura de que moriré en el intento. Cada mes nos decimos que han pasado muchas cosas en tan poco tiempo, pero es que nos siguen pasando cosas. Y todas son buenas porque incluso las malas nos unen todavía más y nos hacen más fuertes. Y es que a tu lado vivo en un sueño constante, un sueño donde no hay fronteras, donde todo es posible, y del que no quiero despertar. Me veo siendo muy viejecito y aún durmiendo abrazados, buscándonos por la noche dormidos y despertándonos con un beso y una sonrisa. No hay mejor manera de vivir que a tu lado. Te has convertido en una parte tan importante de mí que cuando no estás me cuesta respirar.

Gracias por estos increíbles nueve meses.


Te quiero.





sábado, 5 de diciembre de 2015

Felicidades mi niño



No solamente creces tú, sino que haces que todos notemos que también nos hacemos mayores. 
Parece que hace nada que te cambiaba los pañales y mírate ahora, ocho años y ya se puede decir que vas a ser una gran persona. 
Y es que no te puedo querer más. 
Pase lo que pase quiero que sepas que siempre estaré orgulloso de tener un hijo como tú.
Espero que pases un gran día de cumpleaños, y que este año sea mejor que tus siete anteriores y peor que los que te llegarán.

Felicidades Raúl.

Te quiero.



Tu papi.




viernes, 4 de diciembre de 2015

Cumpleaños triste



No creas que porque ya no estés aquí no iba a felicitarte hoy. Como cada año te diré felicidades, con la diferencia de que ya no puedo llamarte ni deseártelo en persona. 
Ya no puedo ponerte cava, ni escuchar  tus ruegos para que te ponga más. Me tendré que conformar con un brindis silenciado por las lágrimas. 
Aunque estoy seguro que te deben haber hecho una fiesta sorpresa allí donde estés, y que estarás a nuestro lado cuando brindemos hoy por ti.
Y es que aún te añoramos todos. Algunos lo hacemos cada día, y es normal que días como hoy nos vengamos un poco abajo.

Felicidades papi.

Te quiero.




viernes, 27 de noviembre de 2015

De mudanza



Después de unas cuantas mudanzas a mis espaldas uno se hace casi un experto. Eso de llenar cajas, desmontar muebles, transportar, vaciar las cajas y volver a montar los muebles es ya una rutina que controlo y además me gusta. Qué le vamos a hacer, soy raro.

Y si al gusto de desmontar y montar muebles le sumamos el significado, pues he de decir que estoy súper ilusionado. Ir a vivir a una nueva casa contigo, empezar una nueva etapa contigo, me entusiasma.

Siempre se dice “contigo hasta debajo de un puente”, pero si además de contigo es en una casa que nos gusta, pues ya no puedo pedir más. Además, ver la ilusión también en vuestras caras me emociona más todavía. Y es que contigo todos los problemas van desapareciendo, cada día a tu lado es un sueño que va cogiendo forma.

A las buenas personas les pasan cosas buenas, y yo tuve que ser muy bueno en otra vida por todo lo bueno que me está sucediendo.



Te quiero.



miércoles, 18 de noviembre de 2015

La historia de Mía



Mía era una niña nacida en una muy humilde familia. Nunca se quejó por no tener juguetes o vestidos nuevos. Incluso se acostumbró a comer poco. Pero cada noche se convertía en la niña más afortunada del mundo, soñando con ser la reina de las modistas, viendo como sus ropas desfilaban en pasarelas de todo el mundo. 

Cada día, al salir del colegio, se paraba en el escaparate de la sastrería de Monsieur Pierre, donde intentaba absorber todo lo que entraba por sus ojos. Miraba detenidamente los vestidos y trajes expuestos, y se quedaba hipnotizada viendo como el sastre hacía los trajes y su costurera daba forma a los vestidos. El dueño de la sastrería, al verla cada día allí parada, la contrató para hacer recados, lo que ayudó a Mía a poder ver más de cerca el mundo de la costura y aprender mucho más. Con su primer pequeño sueldo compró agujas, hilos de todos los colores y algo de tela. Por las noches le hacía vestidos a la única muñeca que tenía, pensando que era la primera modelo que lucía sus inventos en la gran ciudad de París. 

Un día Mía no apareció por la sastrería y, ante el asombro de Monsieur Pierre de ver que no había venido, se fue en su busca. La niña estaba en cama con mucha fiebre, pero eso no fue lo que dejó de piedra al sastre, lo que le dejó sin palabras fue la colección de vestiditos que tenía colgados en un mueblecito que le había hecho su padre para tenerlos recogidos. Monsieur Pierre estaba asombrado al descubrir que esa niña tenía un don increíble para la costura. Ese día supo que su pequeña repartidora iba a ser una de las grandes en ese mundo. Cada día le enseñaba todo lo que sabía y se llenaba de orgullo viendo como en poco tiempo conseguía hacer trabajos tan increíbles que ni él los podía igualar. Cuando cumplió dieciséis años, le pidió permiso a sus padres para mandarla a París, donde una amiga suya iba a acogerla y terminar de pulir ese don. Por supuesto los padres no podían estar más felices de ver que su hija iba a tener un futuro lejos de la pobreza de su hogar y no dudaron ni un momento.

Hoy en día, Mía se ha convertido en la más codiciada modista de todo el mundo, vistiendo a grandes personalidades y triunfando en todos los desfiles de moda. Los que la conocen de cerca dicen que a veces va acompañada de un ayudante llamado Monsieur Pierre y de sus padres. 

Pero lo que siempre lleva encima es una vieja muñeca a la que usa de maniquí de sus próximos proyectos.




sábado, 14 de noviembre de 2015

No al terror



Es triste ver como hay personas que hacen su propia lectura de su religión y consiguen difundir el terror en todo el mundo. En pleno siglo XXI sigue habiendo matanzas de personas inocentes en nombre de la religión. No hemos aprendido nada durante la historia. Matar llevando por bandera una religión es de gente que no tiene nada sobre los hombros. Supongo que la mayoría de personas en todo el mundo debe estar como yo, con una mezcla de rabia y pena por lo sucedido. Pero no aprendemos, seguimos invadiendo paises e imponiendo nuestras políticas simplemente por conveniencia de los poderosos, sin pensar en las consecuencias que están recayendo en los inocentes. Y si ya es de locos ponerse un chaleco de explosivos y explotarse en nombre de la religión, lo es más asesinar a gente inocente que incluso debe haber protestado contra esa política exterior.
Todo mi apoyo a los que hoy han sido sacudidos por el terrorismo, y mi más rabiosa repulsa a todo terrorista, sea cual sea su procedencia.




Ocho meses



Sí, has leído bien, ocho meses.

Parece que fue ayer cuando nos tomamos ese “último café” y al mismo tiempo parece que llevamos años juntos. Ni en mis mejores sueños imaginé que alguien tan especial como tú se pudiera enamorar de mí. Y sí, es verdad que no son los besos sino quien los da, no es el mensaje sino quien lo envía, no es la canción sino a quien te recuerda. Pero me quedo con los suspiros y los abrazos que demuestran algo que no se pueden explicar ni con esos besos, ni con esos mensajes ni con esas canciones. Y es que a veces un silencio o una mirada dicen más que unas palabras. Te hablo de un sentimiento tan grande que será eterno, un sentimiento que ni en nuestros malos momentos bajará de intensidad. A tu lado soy el caballero capaz de conquistar castillos, batir ejércitos o derrotar imperios. Tú eres mi armadura a la que ninguna flecha puede atravesar, y yo quiero ser tu escudo capaz de detener las llamas de cualquier dragón enfurecido. Poco a poco estamos construyendo nuestra fortaleza, a la que hemos dejado la puerta abierta para todo el que quiera ser partícipe del amor que desprendemos, y cuya bandera no tiene una flor de lis, sino seis, y ondea en la torre más alta.


Te quiero mi dama.






miércoles, 4 de noviembre de 2015

Un banco con historia



Siempre pasaba por el parque a la vuelta del trabajo de camino a casa. Siempre era la misma rutina. Además me ayudaba a desconectar. La verdad es que pasear por debajo de los árboles, respirar aire puro, el olor de la hierba, el sonido de los pájaros revoloteando buscando un lugar donde dormir, me ayudaba a llegar a casa más relajado. 

Al principio te fijas en todo, en los niños jugando y riendo, las parejas paseando de la mano, gente como yo que salía de su trabajo, aun inmersos en él… Pero con el paso del tiempo ya no te fijas tanto en estos detalles. Pero un día empecé a observar a un hombre mayor que siempre estaba sentado en el mismo banco. 

Era un hombre robusto, bien vestido, afeitado a diario, de pelo canoso y muchas arrugas en el rostro. No me hubiera llamado la atención de no ser porque día tras día era la misma foto. Se sentaba allí y no hacía nada. No hablaba con nadie, tenía la mirada pedida supongo que en sus propios recuerdos. Sólo estaba allí, como si fuera una estatua que un día pusieron en ese parque sin motivo ninguno. Cada vez mis regresos a casa por esa zona se hacían más lentos, hasta incluso llegué a sentarme en un banco cercano a observarlo. 

Un día no aguanté más y me senté a su lado. Por educación le dije buenas tardes, a lo que no hubo respuesta alguna, ni siquiera un pequeño gesto.  Lo único que me convencía de que ese hombre estaba vivo es que de vez en cuando soltaba un suspiro, pero no uno cualquiera, sino un suspiro desde el fondo de su alma. Ya no aguanté más y decidí hablar con él:
-          Buenas tardes señor. Disculpe mi atrevimiento, pero llevo días observándole y siempre le veo aquí sentado, sin hacer nada, con la mirada perdida, y me mata la curiosidad.

Para mi sorpresa, y sin perder esa mirada en el vacío, me contestó:

-          Buenas tardes. No era mi intención llamar la atención de nadie. Simplemente vengo a este parque, a este banco, porque es donde conocí a mi mujer y donde veníamos a menudo. Una enfermedad se la ha llevado hace poco, y vuelvo aquí cada día a esperar que venga a sentarse a mi lado, a cogerme de la mano como siempre hacíamos. Han sido muchos años juntos, dándonos amor y cariño cada día, y ahora que ya no está se ha ido con ella una parte tan grande de mí que lo único que me queda es este banco en este parque y los recuerdos de una vida llena de felicidad a su lado.

-          Lo siento mucho. Veo que la debió querer mucho.

-          Éramos todo el uno para el otro. Ella lo era todo para mí. Desde el primer día que nos conocimos no nos hemos separado ni un momento. A Cupido se le debieron caer todas sus flechas sobre nosotros aquel día. No creo que nadie en el mundo pueda llegar a amar como lo hicimos nosotros, ni con tanta intensidad.

Y se volvió a perder en sus recuerdos. Ya no quise molestarle más y me fui. Reconozco que me emocionó tanto su historia que no pude evitar dejar caer alguna lágrima y esa noche no pude dejar de pensar en ese pobre hombre, en su gran amor y en su gran tristeza.

Al día siguiente salí apresurado de la oficina y con paso ligero llegué al parque con ganas de volver a verlo y conocer más sobre su gran historia, pero en ese banco no había nadie. Le pregunté al guarda si por casualidad sabía algo de aquel hombre canoso y de mirada perdida, y me comentó que le había dado un infarto esa mañana y que no estaba bien de la cabeza, pues mientras el médico de la ambulancia le trataba y antes de morir, lo único y lo último que se le escuchó decir fue “sabía que vendrías a por mí” y que era la primera vez que le había visto sonreír.


Estoy seguro de que ahora vuelve a estar feliz de la mano de su gran amor.



jueves, 22 de octubre de 2015

Ilusiones y desilusiones



A veces te ilusionas por algo con tantas ganas que no se te va de la cabeza. Incluso inconscientemente contagias esa ilusión a los que te rodean. Hablas de ello sin querer, sin darte cuenta. Haces planes como si ya lo tuvieras, soñando con lo que harás o dejarás de hacer. Y te dices que no te ilusiones aún, que todavía es pronto y puede no salir bien, pero nada, no hay manera. Y es que ilusionarse es normal, todos nos ilusionamos por cosas.

Lo malo viene cuando eso que ilusionabas con tantas ganas se desvanece…  y te da el bajón. Es como si le quitan un caramelo de la boca a un niño. Te entristeces tanto que empiezas a llorar, te culpas por haberte hecho tantas ilusiones después de haberte repetido miles de veces que no lo hicieras, te sientes fatal por haber contagiado esas ilusiones provocando esa pena ahora en los demás. Pero todo pasa y, con el tiempo te das cuenta de que era lo mejor que podía pasar.

Y es que todo pasa por algo. Si no has tenido lo que te ilusionaba es porque no era para ti, o porque vendrá algo mejor que ni siquiera ahora te imaginas.

Lo importante es pasar página cuanto antes, olvidar esa desilusión y tirar pa’lante, y sí, volverte a ilusionar por otra cosa, que además de ser lo normal, es sano, pues mientras tengas ilusión por algo te sentirás un poco más feliz.


Recuerda siempre que lo mejor está por llegar.





miércoles, 14 de octubre de 2015

Siete meses



Pues sí, seguimos sumando meses… y me encanta!

Y aún sigo disfrutando con tus “buenas noches” y tus “buenos días”, con tu sonrisa, con tu mirada, con tu conversación, con tu olor, con tu abrazo, con tu compañía. Aún sigo gozando de nuestros momentos de sofá, de mesa, de cama. Aún sigo deseando verte, abrazarte.

Parece que fue ayer que atábamos en corto nuestros planes, intentando controlar unos deseos de futuro ahora descontrolados.

Y es que aún con todo lo vivido en este poco tiempo, te puedo asegurar que lo mejor está por venir, pues cada mes que paso a tu lado es mejor que el anterior.

Siempre digo que a las buenas personas les pasan cosas buenas, y yo debo de ser muy bueno para haberme pasado algo como tú.



Te quiero hasta el infinito y más allá.



jueves, 8 de octubre de 2015

¿Bailamos? Papá quiero jugar




Vale la pena que veáis este vídeo. Seguro que todos os sentiréis identificado con este padre. Y es que somos así, siempre pensando en el futuro de nuestros hijos, queriendo lo mejor para ellos según nuestro punto de vista, intentando darles lo que nosotros no tuvimos, pensando que así tendrán una vida mejor que la nuestra. Pero no pensamos en lo que son realmente: NIÑOS.

Es verdad que la educación les hará seguramente gente preparada, pero el que disfruten la infancia seguro que les va hacer mejores como persona. Un niño debe aprovechar su estancia en el colegio y aprender, aprender y aprender. Pero al salir del colegio debe jugar, explorar, reír, llorar, saltar, correr, trepar, caerse, levantarse, gritar… todo lo que hacen los niños; seguramente lo que hacíais vosotros cuando erais niños.

Y tan importante como esto es que nosotros formemos parte de ello. Durante un rato cada día, olvidad que sois padres, volved a ser niños con ellos y jugad, explorad, reíd, llorad, saltad, corred, trepad, caeros, levantaros, gritad… y hacedlo sin la vergüenza de una persona mayor. Os aseguro que volveréis a sentiros vivos y, lo más importante, vuestros hijos recordarán esos momentos siempre.

Y es que no sabemos qué nos deparará el mañana, si lo que les hagamos estudiar hoy les servirá para un futuro desconocido, si existirán los pianos o la danza, si el idioma del futuro será el vasco o el sueco… Pero lo que sí os puedo asegurar es que los niños seguirán queriendo ser niños, y que sus mejores recuerdos serán aquellos días de baile a lo loco con su padre, o aquel día de cocina con su madre cuando se les cayó la tarta al suelo y les entró un ataque de risa, o la tarde de spa y belleza improvisada que le preparó su madre, o el rato de vergüenza  que pasó cuando su padre quiso ser niño de nuevo delante de sus amigos y el orgullo que sintió cuando esos amigos le dijeron que tenía un papi guay…


Así que ya sabéis, cuando sean mayores querrán parecerse a sus padres, y qué mejor ejemplo que unos padres que también sepan ser niños.







martes, 6 de octubre de 2015

Felicidades mami



Bueno, pues ya ha pasado un año más. Y no me quiero repetir en lo de que eres la mejor madre y todo eso. 
Pero sí es verdad que sigues siendo mi gran pilar, mi gran apoyo. Sigues estando ahí para lo que se te pida sin ni siquiera una mueca de desagrado. Sigues enseñando tus alegrías y ocultando tus penas. Sigues enseñándome el camino a seguir para ser una buena persona, para ser alguien parecido a ti. Sigues haciéndote querer por los de siempre y por la nueva familia que ha llegado, que ya te adora.

Y es que no hay palabras suficientes para expresar lo que te quiero y te admiro.



¡Felicidades mami!




domingo, 4 de octubre de 2015

16 otoños



Hoy es el cumple de la mayor de mis peques.

Cumple esa edad que confunde a todo niño haciéndole creer que ya es adulto, con ganas de comerse el mundo, con un reloj acelerado pero ansiosa porque va muy despacio.

Casi mujer de cuerpo precioso e  increíbles ojos, de interminable conversación y escondida timidez; con personalidad arrolladora de la que no es fácil escapar.

Hoy te deseo un muy feliz cumpleaños, y que todos tus deseos se cumplan sin hacerte esperar demasiado.


Felicidades Mar



jueves, 1 de octubre de 2015

Si supieras...


Si supieras que te miro cuando duermes, que se me erizan los pelos cuando me abrazas dormida, que me encantan nuestras charlas antes de dormir, que no hay mejor despertar que hacerlo a tu lado…

Si supieras que no quiero que te vayas a trabajar, que me cuesta estar todo el día sin ti, que deseo salir del trabajo para volver a verte…

Si supieras lo que me duele tu dolor, lo que me hace llorar tu llanto, lo que me alegra tu risa, lo que me gusta tu mirada, lo que me encanta tu abrazo, lo que deseo tu beso…

Si supieras que necesito mirarte, que necesito tocarte, que necesito sentirte a mi lado…

Si supieras que te has convertido en mi mejor amiga, en mi mejor compañera, en mi mejor almohada, en mi mejor amante…

Si supieras que ya no soy sin ti, que eres el latido de mi corazón; que eres mi aliento, mi mente y mi alma; que te necesito más que una flor necesita al sol…

Si supieras que todo esto que te escribo ni se acerca a lo que realmente siento y me haces sentir…



Si supieras lo que de verdad te quiero…



miércoles, 23 de septiembre de 2015

Adiós



Y te vas. Aquí me dejas sin importarte la tristeza que me causa tu ausencia. Sé que es temporal, pero no sé si podré acostumbrarme a estar sin ti. Añoraré el disfrutarte cada día hasta altas horas de la noche. Y es que sólo tú me hacías sudar así, me desvelabas por la noche, hacías que me sobrara la ropa, conseguías que se me cayera el techo de la casa si estaba mucho tiempo en ella. Había días que me agobiabas tanto que era insoportable, pero aún así siempre había algo que me relajaba: una cerveza bien fría, un baño en la playa… Ahora miro al horizonte y todo es triste, los árboles pierden las hojas, el sol se esconde cada vez más tiempo, la gente ya no sonríe con tanta facilidad, las fiestas a cualquier hora y en cualquier sitio ya se han acabado…

Y es que te acabas de ir y ya deseo que vuelvas otra vez.




Te quiero VERANO.





martes, 22 de septiembre de 2015

Felicidades Eva



Hoy es el cumple de una persona especial. 
Es una gran amiga de quien la merece, una hija muy querida, una hermana perfecta, una esposa que desearía todo hombre, y una madre increíble. Pero no solamente es eso, además es guapa, simpática, amable, cariñosa, alegre. Es alguien a la que quiero con locura. Alguien que tiene el brillo de la estrella que bajó del cielo hace treinta y tres años para darle esa luz que atrae a todo el mundo. Y es que si no existiera, este mundo sería un poquito más triste y a mí me faltaría un trocito de corazón.

Muchísimas felicidades hermanita. Te quiero un huevo.






lunes, 14 de septiembre de 2015

Seis meses





Seis meses y parece una eternidad. Seis meses y acabamos de empezar. Si tengo que hacer balance… no tengo palabras suficientes para describir lo vivido. Sólo sé que no cambiaría nada, pues no quiero correr el riesgo de arreglar algo del pasado y cambiar algo de este futuro. Sólo sé que no te puedo querer más, y sin embargo cada día te quiero más. Sólo sé que te buscaré en otra vida para volver a estar junto a ti. Sólo sé que ya no quiero nada sin ti, nada que no seas tú, nada más que a ti. Seis meses vividos a una velocidad de vértigo, en los que hemos vivido momentos increíbles. Es que contigo cada día es especial.


Pero lo que más me gusta de estos seis meses es que tan sólo es el prólogo de una increíble historia sin fin, una historia que escribimos día a día y de la que se hablará durante mucho tiempo.



miércoles, 9 de septiembre de 2015

Felicidades cariño



Hoy es un día de celebración, hoy es tu cumpleaños. Para mí es especial pues es el primer cumpleaños que estás conmigo. Al igual que el buen vino, cuanto más tiempo, mejor eres y más vales. Aunque sé que no te hace mucha gracia cumplir años, te aseguro que estás en uno de los mejores momentos que has vivido, y los que vendrán serán aún mejores.

Conforme te vas haciendo mayor vas cambiando la perspectiva, la forma de mirar las cosas; empieza a perder importancia lo que antes tenía, y otras comienzan a ganar importancia. Que pasen los años significa que ganas sabiduría, ganas seguridad. Es un privilegio poder estar a tu lado durante tu transformación.

Hoy te darás cuenta de que te quiere muchísima gente. Vas a recibir muchas felicitaciones, por Facebook, por WhatsApp, por fijo, por móvil, de gente de toda la vida y de la que ha llegado hace poco… incluso de gente que ya no está a tu lado, pero buscará la manera de hacerte llegar su felicitación y de que la sientas. Hoy es un día para sentirte feliz, de pedir un deseo con el corazón, que seguro que se cumplirá.

Te deseo lo mejor y que sigamos celebrando muchísimos cumpleaños juntos.


Te quiero con locura Mari Carmen





viernes, 4 de septiembre de 2015

Rabia


Tengo una mezcla de sentimientos.

Por una parte me da una pena enorme ver cómo hay gente que tiene que huir de sus países por culpa de unos locos que en nombre de la puñetera religión se siente con el derecho de imponer sus creencias a golpe de balas y bombas. Esos países que si en su momento nadie hubiera intentado saquear, seguramente hoy no estarían como están.

Por otra parte siento rabia. Rabia al ver cómo Europa ha ignorado durante años nuestro problema de inmigración en España, pero ahora todo el mundo está buscando una solución urgente cuando esta gente busca un futuro mejor en países como Alemania, Francia o Bélgica.

Y también siento vergüenza. Vergüenza de ver que los noticieros pueden poner las imágenes que les den la real gana, a la hora que sea, sin que nadie diga nada. Imágenes que pueden ser tan fuertes como la de un niño de tres años ahogado en la orilla del mar. Imágenes que a las tres de la tarde las puede ver cualquier niño en casa y al que hay que responder a su pregunta de “papá, ¿porque hay un niño ahí?, ¿Qué le pasa?”.

Que la gran mayoría de periodistas se pase la ley de la objetividad por el forro ya no sorprende a nadie. Que según la cadena de televisión que veas o el periódico que leas cambien las noticias a derecha o izquierda ya no molesta, la gente ha optado por leer lo que quieren leer. Pero que valga cualquier cosa para ser líder de audiencia… Eso ya no tiene nombre. Buenos, sí lo tiene, pero no lo voy a escribir.

Qué se puede esperar de un país donde hay leyes que no son justas, donde los ricos son más ricos y los pobres son más pobres, donde se juzga más rápido y con más dureza el robo de unos pañales que el robo de millones de euros, donde los poderosos roban descaradamente haciendo que paguen los de abajo, donde entrar en la cárcel no es lo mismo para un rico que para un pobre ni por tiempo ni por comodidades, donde por ley ya no puedes ni protestar por unos derechos que costaron sangre, sudor y lágrimas conseguir y nos están quitando sin ni siquiera ponerse un poquito de vaselina; donde hubo un día en que la gente de abajo se hartó y salió a la calle con las ganas y la energía para poder cambiar las cosas, pero tengo la sensación de que con el tiempo se ha quedado en eso, en una mecha de esperanza apagada antes de entrar en el polvorín.


La verdad es que, entre la meteorología y los humanos, parece que el mundo se está yendo al carajo.  Menuda herencia les estamos dejando a las futuras generaciones.




martes, 1 de septiembre de 2015

1 de septiembre


Uno de septiembre, nueve de la mañana, 67 kilos, dos meses sin pisar el gimnasio y, después de quince días sin trabajar, hoy vuelvo al curro.
La verdad es que no tengo ese síndrome post-vacacional. Debe ser que ya tenía asumido que tenía que volver.
Han sido unas buenas vacaciones de verano. A lo típico de playa, piscina, sol, mucha comida y mucha cerveza, hay que sumar el conocer a gente nueva y agrandar la familia. Siempre hay días de estrés, de nervios, pero al final el balance ha sido positivo. Me ha gustado conocerte Edu, a ti y a tus hijos. Eres una persona increíblemente fuerte. Aún con lo que soportas sobre tus hombros, es raro verte perder la sonrisa aunque tus ojos no consigan ocultar tu tristeza. Estoy seguro que todo saldrá bien. A las buenas personas les pasan buenas cosas, aunque a veces tarden demasiado. Ánimo.
En cuanto a lo demás… pues eso. Qué se puede esperar de unas vacaciones en Mallorca, rodeado de gente maravillosa, mis hijos y mi familia, cada vez más numerosa, y al lado de una mujer que ilumina más que el Sol. Y es que no puedo pedir más.


He vuelto al trabajo tal y como me fui: Con una sonrisa de oreja a oreja, más feliz que una perdiz y con más ganas de ti.





viernes, 14 de agosto de 2015

Cinco meses



Cinco meses, cinco increíbles meses junto a ti.
Sé que puedo ser repetitivo, pero es que cada día junto a ti es un sueño hecho realidad. Cuando estoy sin ti no puedo dejar de recordarte, y cuando estoy contigo no puedo dejar de disfrutarte. Eres mi debilidad, mi droga de la que no puedo ni quiero desengancharme. No puedo pedir más, lo tengo todo… te tengo a ti. Que tu cara sea lo último que vea por las noches sólo es superable por que sea tu cara lo primero que veo por la mañana. Quiero seguir contado no meses, sino años junto a ti. Eres mi aire, mi sol, mi agua y mi alimento. Eres lo que necesito para seguir viviendo. Te estaré eternamente agradecido por haber sido tan valiente en aquella invitación. Si hubiera sabido lo que iba a salir de allí, te prometo que la invitación hubiera sido mía mucho antes. Haces que cada molécula de mi cuerpo te desee. No creo mucho en el destino, pero tengo la sensación de que algo o alguien extraordinario nos ha unido, y esta unión ha sido tan fuerte que no habrá nada en este universo que nos pueda separar.

Te quiero.




miércoles, 12 de agosto de 2015

Eres poesía



A ti, que me endulzas los días,
que me miras y lo malo se me olvida.
A ti, que me acompañas agradecida
por mi locura que es mi vida.
A ti, que pasaste de ser parte de mí a serlo todo.
A ti, que en tu regazo me siento muy cómodo.
Por tus despertares, por tus anocheceres.
Por tus albas y tus atardeceres.
Por tus caricias, por tus palabras y tus silencios.
Por tus gestos, por tus abrazos y tus besos.
Por tus sonrisas y por tus lágrimas.
Por tus miedos y tus grimas.
Por tus increíbles ojos y tu gran mirada.
Por tu seguridad en la pisada.
Por tu compañía cuando estás y cuando no estás.
Por tus ganas que nunca calmarás.
Por tus llamadas y mensajes.
Por tus sentimientos más salvajes.
Por lo que dijiste, dices y dirás.
Por lo que has sido, eres y serás.
Por tu fuerza y por tu debilidad.
Por tus preocupaciones y tu ansiedad.
Porque eres mi sueño.
Porque sin ti me siento pequeño.
Porque eres mi tranquilidad.
Porque tú no tienes maldad.
Porque eres mi cojín y mi almohada.
Porque ya sin ti no soy nada.

Por todo esto y por mucho más
Lo nuestro durará toda la eternidad.


lunes, 27 de julio de 2015

Me encanta mi familia



Me encantan los fines de semana como este, rodeado de la familia. Familia increíble la que tengo. 
Unos amigos que son parte de esta familia, una madre extraordinaria, unos hermanos a los que quiero con locura, unos cuñados que hace mucho tiempo pasaron a ser hermanos, unos sobrinos que me tienen enamorados, unos hijos a los que no puedo querer más y que van creciendo en número… Y una pareja impresionante, el perfecto complemento que le faltaba a mi vida. 
Y es que con vosotros a mi lado estoy tan feliz que no lo puedo disimular. Con vosotros lo tengo todo, no necesito nada más.


Y es que por vosotros haría cualquier cosa.

martes, 14 de julio de 2015

4 meses



“ Y es que yo no quiero pasar por tu vida como las modas. No se asuste señorita, nadie le ha hablado de boda. Yo tan sólo quiero ser las cuatro patas de tu cama, tu guerra todas las noches, tu tregua cada mañana. Quiero ser tu medicina, tus silencios y tus gritos, tu ladrón, tu policía, tu jardín con enanitos. Quiero ser la escoba que en tu día barra la tristeza. Quiero ser tu incertidumbre y sobre todo tu certeza”.

Esto y más es lo que quiero ser para ti. Quiero ser el Melendi que te cante al oído, el Superman que te proteja de todo mal, el peluche al que te abraces por la noche, el Gustave Eiffel que te ayude a construir nuestro futuro, tu Elena al que le puedas confiar tus secretos, tu máquina del tiempo para que repitamos una y otra vez, tu Luna para alumbrar tus noches, tu Sol para calentarte cuando tengas frío, tu atrapasueños para que duermas sin miedos, tu Estrella Polar para guiarte siempre por el camino que te lleve hasta mí.

Quiero ser el TODO que tú eres para mí.


Te quiero.


viernes, 10 de julio de 2015

Dos años sin ti



Hoy hace dos años que te fuiste. Hoy hace dos años que te echo de menos. Aún sigo recordándote, sigo huyendo de las conversaciones sobre ti. Aún se me parte el alma cuando te veo en fotos. Aún lloro cuando hablo sobre ti. Y, como el año pasado, aún lloro escribiendo sobre ti.
Sé que llegará un día en el que ya no llore, pero siempre me emocionaré recordándote. Cuando te fuiste dejaste un gran vacío en todo el que te conoció. Sé que hoy, para tus hijos, tu mujer y tu familia va a ser un día triste. Hoy se te va a echar un poco más de menos.
Aunque sé que lo haces a menudo, hoy me gustaría que vinieses a vernos. Si me lo prometes, yo te prometo que te comeré a besos, que te romperé a abrazos, que nos tomaremos algo fresquito para celebrar el reencuentro. Lo que no te puedo prometer es que te deje escapar de nuevo, eso ni puedo prometértelo… ni quiero.



Te quiero papi.




Felicidades abuelita



Hoy es 10 de Julio. 
Hoy, hace 86 años, nació una persona maravillosa, una mujer increíble, con un corazón que le ocupa todo el cuerpo. Una mujer que se ha sabido levantar después de las duras caídas que ha tenido. Alguien a la que quiere todo el mundo, y el mundo no sería lo mismo sin ella. El pegamento invisible de esta familia. Un ejemplo a seguir. Con arrugas de sabiduría y belleza. El amor de tus hijos, el orgullo de tus nietos y el cariño de tus bisnietos es algo que te has ganado con creces. 
Sé que hoy no será uno de tus días más felices, pero quiero que sepas que te quiero con locura, aunque no te lo demuestre lo suficiente.


Felicidades abuelita.






martes, 7 de julio de 2015

San Fermín


Hoy es San Fermín. Hoy es el día que muchísima gente lleva esperando todo el año. Hoy empiezan los encierros tan esperados. La gente se lo va a pasar en grande, sin descansar durante una semana. 
Pero hoy también es un día triste para una persona, alguien a quien quiero con locura. El destino quiso que en cuestión de tres días coincidamos hasta en el dolor del recuerdo.
Pero no te preocupes. A partir de este año prometo hacer que sea más llevadero. Ahora me tienes a tu lado y mis abrazos hoy serán más tuyos que nunca, que ahora tu dolor es mi dolor y juntos podemos con cualquier tristeza. Debes estar feliz por la gran mujer que ha hecho de ti. Estoy seguro que no deja de cuidarte ni un momento, que sigue contigo, alegrándose por tus éxitos y consolándote por las noches cuando se tuercen las cosas. Hoy volverás a hablar con ella y de alguna manera te contestará. Hasta es posible que ahora tenga familia nueva, y juntos estén moviendo los hilos de nuestras vidas para que no nos tropecemos nunca.

Ánimo cariño, sabes que me tienes aquí.


lunes, 29 de junio de 2015

Sólo tú



Después de tres meses y medio sigo haciendo balance, y sigue siendo muy positivo. 
Y es que eres increíble. Has entrado pisando fuerte no sólo en mí, sino en todos los que te han conocido. Te haces querer en cuanto te conocen. No pasas desapercibida para nadie. Eres cariñosa, amable, simpática, juguetona, risueña, agradable, marchosa… Si bien gustas a primera vista, en las distancias cortas enamoras. Has conseguido que en este corto período de tiempo ya se te quiera, y no por con quien estás sino por quien eres. Te empecé a querer desde el primer “café”, y cada día que pasa te quiero más. Cada día que pasa te haces más indispensable para mí. Ya me has atrapado tanto en tu red que ni puedo ni quiero escapar de ella.

TE QUIERO


La familia



Ayer fue la comunión de mi sobrino. ¡Muchísimas felicidades Iker!

Siempre disfruta uno de las fiestas, pero estas fiestas son especiales. Poder reunir a toda la familia hace que sea un día especial. Y es que tengo una familia impresionante. Que lleguemos a ser tanta gente y que todo el mundo se lo pase tan bien y que no haya ningún problema es fantástico. Si además sumamos el calor y una piscina, pues os podéis imaginar. Cuando te rodeas de calor, agua, comida, bebida y gente maravillosa, sólo puede salir un día inolvidable. La única pena es que se acabe el día.

¡Me encanta mi familia!




miércoles, 24 de junio de 2015

Si volviera a nacer


Siempre se dice eso de que si volviera a nacer mi vida sería muy diferente, que no volvería a cometer los errores cometidos. 
Yo no pienso así. Yo no cambiaría nada. 
Volvería a disfrutar los grandes momentos que he vivido, volvería a aprender de los errores cometidos. 
Si volviera a nacer volvería a tener a estos dos hijos maravillosos que tengo. 
Volvería a disfrutar de las amistades que se han cruzado en mi camino. 
Volvería a tratar a la gente igual. 
Volvería a querer a mi familia como la quiero, porque si ahora me quieren tanto debe ser porque no lo he hecho nada mal.
Si volviera a nacer volvería a cometer los mismos errores, pues ellos me han llevado hasta ti.
Te buscaría en todas las vidas que volviera a tener.


lunes, 22 de junio de 2015

Porque...


Porque lo sigues logrando.
Porque sigues consiguiendo que cada fin de semana que pasa sea mejor que el anterior.
Porque me encantas cada día más.
Porque te voy conociendo cada día un poco más.
Porque me encantan tus sorpresas.
Porque sabes que siempre te haré un sitio a mi lado.
Porque me encantan tus desvelos.
Porque disfruto tus siestas.
Porque te admiro por cómo eres.
Porque me encantan tus detalles.
Porque consigues hacerme sentir lo que siento.
Porque me encanta tu amistad.
Porque crece nuestra complicidad.
Porque no me resisto a tu mirada.
Porque disfruto verte disfrutar.
Porque tus locuras superan a las mías.


Por todo esto y por lo que me callo… TE QUIERO

lunes, 15 de junio de 2015

3 meses y sigues a mi lado



Tres meses, tan sólo tres meses. 
Me es imposible elegir el mejor momento de estos tres meses porque todos los días han sido especiales. Da igual lo que hagamos, dónde o con quién estemos, o a dónde vayamos, pues tú haces especial cualquier momento o lugar.
¿Que qué es lo que más me gusta de ti? ¡TODO! Tu sonrisa, tu caminar, tu dormir, tu mirada, tus abrazos, tus palabras, tus besos, tu… todo. Eres increíble como persona, como amiga, como madre, como hermana, como hija, como mujer.
¿Y qué es lo que menos me gusta de ti? Aunque tuvieras defectos, que supongo que algún día encontraré alguno, te quiero tal cual, con tus extraordinarias virtudes y tus aún desconocidos defectos, no te cambiaría nada.
Tan sólo quiero volver a darte las gracias por cruzarte en mi camino. Que aunque la gente piense que ya somos empalagosos (si es que lo piensan), ni escribo ni digo todo lo que siento. Que, le duela a quien le duela, lo nuestro es tan grande y tiene unos cimientos tan fuertes que no hay terremoto que lo derrumbe. Que tenerte a mi lado es maravilloso. Que el hecho de que me quieras es increíble. Que lo que me das es inmenso y no sé si te lo podré devolver en igual cantidad. Que seguro voy de cabeza al infierno porque hago míos los siete pecados capitales: Soberbia, porque nadie es más feliz que yo. Avaricia, porque te quiero toda para mí. Envidia, porque envidio hasta al viento que te acaricia. Ira, porque me enfada cuando te hacen daño. Gula, porque tengo un apetito insaciable de ti. Pereza, porque no haría otra cosa que estar contigo. Lujuria: prefiero no comentar. Aunque, como ya sabes, tengo enchufe en el infierno por conocer al dueño.

Te quiero Mari.



jueves, 11 de junio de 2015

Mi vida, mi Sara



Como cada mañana, Miguel se levantó temprano con los primeros sonidos de su móvil que usaba también como despertador. Entró en el baño, se afeitó y se duchó antes de desayunar su ansioso café con leche, al que acompañaba con unas tostadas de pan de molde y mantequilla. Se puso su uniforme y se dirigió al trabajo. Trabajaba en una pequeña frutería que había en el barrio, a dos manzanas de su casa, donde se vendía ya de todo. Era la típica tienda donde las señoras del barrio pasaban las horas solucionando el mundo y criticando a sus vecinas más que comprando, acompañadas por supuesto por Paquita, su jefa. Paquita era una mujer mayor, ya canosa, pero con una energía increíble. Había trabajado en esa frutería toda su vida, desde que su padre la abrió cuando ella era una niña, así que conocía a todo el mundo en el barrio.

Aunque Miguel era un hombre tranquilo, llevaba unos días nervioso. El motivo de su nerviosismo era una chica que entró hacía una semana en la tienda a comprar una barra de pan. No sabía que le había pasado, pero cuando vio esos increíbles ojos le empezaron a sudar las manos y tuvo la sensación de volver a tener dos años por lo patoso que estuvo mientras ella estuvo delante. A partir de ese día, ella pasaba por delante de la tienda sobre las nueve menos cuarto, y Miguel paraba cualquier cosa que estuviera haciendo para poder verla pasar. Era el mejor momento de la jornada laboral. No podía quitársela de la cabeza, y soñaba con que entrara otra vez a comprar algo para poder hablar con ella.

Pero ese día, ella no pasó. A Miguel se le pasaron por la cabeza todo tipo de motivos por el cual ella no había pasado esa mañana, desde que se había dormido hasta que le había pasado algo malo. No sabía dónde vivía ni cómo localizarla. De pronto recordó que su jefa conocía a todo el mundo, así que le preguntó si conocía a la chica misteriosa. No sabía cómo lo hacía, pero Paquita ya sabía muchas cosas de ella, aunque sólo llevara en el barrio una semana. Le contó que se llamaba Sara, que se había venido a vivir a dos entradas de la tienda, sola. Que acababa de salir de una relación tortuosa con un novio del que se había enterado que tenía más “amigas” de lo normal. Sara había encontrado trabajo a diez minutos de su casa, en la recepción de una tienda de informática.

Mientras Paquita le contaba lo que sabía de Sara pasó una ambulancia, cosa a lo que no habría prestado atención de no ser porque se paró cerca de la tienda. No pudo evitar pensar que ella era el motivo, así que salió de la tienda y fue a ver qué había pasado, deseando equivocarse en sus malos pensamientos. Pero no fue así. Casi se le para el corazón cuando la vio tumbada en la camilla con los enfermeros corriendo de una manera que nada bueno presagiaba. Después de ver partir a la ambulancia a toda prisa, se dirigió de nuevo a su trabajo. Durante el resto de la mañana no se pudo quitar de la cabeza a Sara, y por la tarde ya no aguantó más y le pidió a Paquita que le diera libre, que necesitaba saber qué había pasado. Por supuesto, Paquita ya había notado lo que sentía Miguel y no puso ninguna pega.

En urgencias trabajaba Toni, un amigo suyo al que conocía desde el colegio. Gracias a esa amistad, pudo saber que el corazón de Sara no había aguantado más y estaba en estado crítico. Si no conseguían un donante urgentemente no duraría mucho. Miguel no lo dudó ni un segundo y se ofreció voluntario para ser ese donante pero, por supuesto, fue algo que no podían aceptar.
Esa noche, a las nueve y cinco,  recibió la policía una llamada alertando sobre un accidente en un piso a dos manzanas de la frutería. Cuando se presentaron en el domicilio junto con la ambulancia se encontraron a Miguel en la bañera, cubierto de agua y quince bolsas de hielo y una nota pegada en el espejo, en la cual se podía leer:

“Para ti, Sara. Porque solamente haber hablado contigo una vez me ha bastado para darme cuenta que no quiero una vida sin ti, que mi mundo no tiene sentido si no te puedo volver a ver. No te regalo mi corazón, pues desde ese día ya era tuyo, ya te pertenecía sólo a ti. No puedo imaginar mejor manera de ser feliz que formar parte de ti.”

Lo que Miguel no sabía era que Sara se despidió a las siete de la tarde, sin saber que el amor de un desconocido iba a devolverle las ganas de vivir.




lunes, 8 de junio de 2015

Bajando de las nubes


Hoy estaba dispuesto a escribir sobre el increíble fin de semana que he pasado, de un primer día de playa en familia donde todos nos lo hemos pasado genial, pero a veces las cosas no son lo que parece. Uno intenta hacer las cosas bien, estar feliz con lo que hace intentando no disgustar a nadie. Uno hace planes pensando en los demás, creyendo que así todo el mundo estará contento. Y acaba un fin de semana con la sensación de que todo ha ido perfecto, que se ha conseguido la meta buscada. Uno se va con cara de felicidad a la cama porque todo el mundo que te ha rodeado está feliz. Pues no, al parecer nunca es suficiente lo que uno hace.
No hay nada que me destroce más que hacer daño a las personas que más quiero en este mundo, aún sin querer y lo que es peor aún… sin darme cuenta.
Hoy ha sido superior a mí. Hoy he vuelto a sentirme sucio, despreciable, mala persona.
Tal vez sea verdad que el problema soy yo. Tal vez sea verdad que soy una persona egoísta, cruel, y malo en muchos aspectos. Tal vez sea yo el que consigue hundir la vida de los que me rodean. Tal vez sea verdad que por dentro soy un ogro. Tal vez tenga engañada a la gente y ni siquiera me esté dando cuenta de ello.
A veces estás flotando tan alto que si alguien viene y te pincha el globo, el batacazo es doloroso, muy doloroso.

La verdad es que uno no sabe ya qué pensar. Ver que sin darte cuenta has hecho daño a lo que más quieres… duele. Como duele el que no consiga dar la suficiente confianza como para que te cuenten sus problemas o sus miedos. Y duele ver que lo que uno ha hecho con el corazón y con la intención de agradar intentando recuperar un tiempo perdido, no sirva o no sea suficiente.


martes, 2 de junio de 2015

Tercer aniversario



No me había dado cuenta, pero el 30 de Mayo este blog, mi blog, vuestro blog, cumplió tres años. Un blog que empezó con la idea de colgar unos cuantos dibujos míos y que, con el tiempo, se ha convertido en la parte visible de mi corazón. Un sitio donde expreso muchos de mis sentimientos. Ha ido creciendo mucho, de dos entradas en 2012 y 2013, pasé a 14 en 2014, y ya voy por 33 con esta en este año.

Sólo quiero daros las gracias a todos los que me leéis. La verdad es que me encanta compartir mis cosas con vosotros y espero que os sigan gustando mis publicaciones.



lunes, 1 de junio de 2015

Normalita




Porque tus besos son normalitos.
Porque tus miradas son normalitas.
Porque tus roces son normalitos.
Porque tus caricias son normalitas.
Porque tus gestos son normalitos.
Porque tus palabras son normalitas.
Porque tus sueños son normalitos.
Porque tus conversaciones son normalitas.
Porque tus pensamientos son normalitos.
Porque tus proposiciones son normalitas.
Porque tus mensajes son normalitos.
Porque tus buenas noches son normalitas.
Porque tus buenos días son normalitos.
Porque las noches contigo son normalitas.
Porque los paseos contigo son normalitos.
Porque las siestas contigo son normalitas.
Porque los helados contigo son normalitos.
Porque las terrazas contigo son normalitas.
Porque los ratos de sofá contigo son normalitos.
Porque las comidas contigo saben normalitas.


Por todo eso y mucho más, yo contigo no me siento nada normalito.


lunes, 25 de mayo de 2015

La crueldad no tiene edad




En el colegio, tener un apellido llamativo o con mala rima, puede ser bastante traumático durante los primeros meses de clase.
O que el matón del cole te haga la vida imposible, lo que hoy llaman bullying, también puede ser muy traumático e incluso dejar secuelas.
Pero que te hagan sentir como el responsable de un suicidio es algo que sale de mi lógica. Que momentos antes de pegarte un tiro le envíes una foto de la escopeta y una frase de despedida a la chica que te gusta, no tiene perdón. Una niña de dieciséis años no deja de ser eso, una niña que aún se está formando, aprendiendo lo que es la vida y creándose como persona, y recibir un palo así es cruel, muy cruel. Si una persona no está de acuerdo con la vida que le ha tocado vivir y decide abandonarla, que lo haga, con o sin explicaciones, pero que no haga partícipe a nadie, y mucho menos casi responsable. Todos sabemos que ella ha sido la excusa y no el motivo, puesto que el que se quiere ir, se va a ir buscando cualquier excusa. Pero los ratos de dolor, de insomnio, de llantos, de ayuno que está pasando una niña por culpa de un imbécil, no se pueden explicar. Cualquier tipo de consuelo es en vano.
Y no quiero parecer frio con el tema del suicidio de un niño, al revés. Me parece muy triste que una persona que está empezando a vivir y al que le quedan muchísimos sueños por cumplir, pueda estar tan desesperado que llegue a proponerse quitarse la vida. Y no digamos sus padres. La cantidad de preguntas que deben tener sólo es superado por el sentimiento de dolor y culpabilidad que deben sentir y sentirán ya para siempre.

Si lees esto, sólo quiero que sepas que estoy aquí para lo que necesites, que hablar siempre es bueno, que no sólo estoy para las risas, que conmigo también puedes llorar y desahogarte.


Y sobre todo, que eres más fuerte de lo que tú te crees, y que esta experiencia no te hará sino más fuerte. Apóyate en tu familia y en tus amigas, y ya verás que este mal trago pasará mejor y más rápido.



lunes, 18 de mayo de 2015

2 meses y un finde especial






















Es increíble lo que puede dar de sí un fin de semana. Un simple viaje puede estar lleno de sentimientos maravillosos, de sensaciones impresionantes y recuerdos inolvidables. Conocer gente nueva, que te acojan en su familia, que conectes con ellos, que se desvivan por ti, y todo ello en 24 horas, es algo que te deja impresionado. 
Muchas gracias Elena, Fran, Hugo y familia. 

Y si a esto le sumamos todos los sentimientos que hemos compartido en lo que ha sido nuestro primer viaje juntos, pues me quedo hasta sin palabras para definir estos tres días.

Dos meses, sólo dos meses y ya eres el tercer pilar de mi vida, lo que nunca llegué a pensar que tendría. En dos meses me has dado más de lo que puedo asimilar. Y lo más grande es que aún nos queda mucho por recorrer. Cada semana que pasa supera a la anterior en todo. Cada vez te haces querer más. En dos meses ya no somos dos personas que se quieren, sino que ya formas una parte de mí tan grande que somos un mismo espíritu. Eres tan grande que dejas huella en toda persona que tiene la suerte de conocerte.

Gracias por elegirme. No podría haber mejor compañera de viaje. Contigo da igual dónde nos lleve este avión, el destino da igual porque no te imaginas lo que estoy disfrutando del trayecto contigo a mi lado.


Te quiero Mari





lunes, 11 de mayo de 2015

Amor fatal




Hoy quiero confesar que te quiero, que no puedo vivir sin ti. 
Haces que todo sea de color de rosa, que se me olviden los problemas. Consigues que pierda la noción del tiempo. Contigo pierdo la vergüenza, pierdo el miedo, no le temo a nada ni a nadie. Cada día que pasa me haces más efecto, tanto que a veces me cuesta hasta hablar, me suben los calores hasta en pleno invierno. Me sabes tan bien que hay noches que ni ceno. Cada vez puedo estar menos tiempo sin ti. He probado otras, pero siempre vuelvo a ti. Ninguna me hace sentir lo que me haces sentir tú. Me acuesto pensando en ti, y me despierto a media noche soñando contigo. En el trabajo están notando que algo me pasa. Y es que ya no me concentro, sólo pienso en ti,  cada minuto te tengo presente. Te necesito como el aire. Contigo mi corazón se calma, mi pulso se normaliza. Y aunque sé que nuestra relación no terminará bien, no puedo dejarte, no puedo dejar de pensar en ti. Incluso el médico me ha recomendado que te deje, que te olvide, al igual que mi familia y amigos.



Sé que sería lo mejor para mí, pero no puedo, te necesito tanto… WHISKY

jueves, 7 de mayo de 2015

Un amor eterno



          Él se despertó, como cada mañana, con los primeros rayos de sol. Se giró hacia ella y se quedó contemplándola. No pudo evitar que se le escaparan las lágrimas cuando empezó a recordar su historia de amor:
          Un cruce de miradas bastó para saber que estarían juntos toda la vida. Aún sabiendo que eran muy jóvenes, no se separaron nunca. Incluso al salir del colegio quedaban en el parque, disimulando sus roces de manos en el tobogán, o sus miradas en los columpios. Fueron creciendo juntos sus cuerpos y su amor. Acabado el colegio fueron al mismo instituto. Ya sin importar las miradas y sin miedo a sus sentimientos, se les veía aparecer cogidos de la mano. Cada vez era más fuerte la luz que desprendían cuando se miraban por los pasillos. Se fueron a vivir juntos en cuanto tuvieron un trabajo, y vivían con intensidad los anocheceres y los despertares. Incluso el paso de los años no apagó las ganas de salir del trabajo para correr el uno junto al otro. Por supuesto que la vida les puso en apuros varias veces, pero eso no hizo más que agrandar lo que sentían el uno por el otro. Incluso cuando ella ya no le recordaba, él la intentaba enamorar día tras día. En esos últimos años le entregó todo su alma y la cuidó como la había cuidado toda la vida, y era la persona más feliz del mundo cuando ella tenía esos pequeños momentos de lucidez y le decía “te quiero”.
          Mientras la miraba ella despertó y, mirándole a los ojos, le dijo estas últimas palabras: “Te prometo que te esperaré allí donde vaya. Nunca romperé la promesa que te hice de amor eterno. No tengas prisa en venir conmigo, sé todo lo que me has dado y te mereces vivir libre de mi carga. Cuando llegue el momento yo misma vendré a buscarte, pero mientras tanto… vive”.
No tuvo tiempo de contestar. Ella volvió a cerrar sus ojos después de darle un último beso y se fue.
          En ese momento pensó que no podría vivir ni un día sin ella, que sólo pensarlo le angustiaba tanto que le costaba respirar. Iba a ser imposible dejar de abrazarla, de besarla, de escucharla, de impregnarse de su olor, de perderse en sus ojos.
          Y así los encontraron un día después, tumbados en la cama, abrazados y con una sonrisa en sus caras.
          
          Y es que no hay nada como encontrar a esa persona que te haga feliz, que te complete, que te llene por completo. Esa persona con la que quieras vivir todos tus días, a la que quieras abrazar, besar, escuchar, oler y mirar eternamente.



lunes, 4 de mayo de 2015

¿Bailas?



Cuando me levanté este viernes, ya sabía que iba a ser un fin de semana muy bueno. Lo que no sabía es que iba a ir mejorando cada día que pasaba. Y es que cada fin de semana, cada día, cada hora que paso contigo va mejorando al anterior. No sé hasta dónde llegaremos, ni cuál será el límite. Lo que sí sé es que cada momento a tu lado es tan especial que a veces hasta me cuesta respirar. Consigues convertir los nervios en tranquilidad, las interrogaciones en exclamaciones. Siempre superas con creces las expectativas. Dejas una huella imborrable en toda persona que te conoce. Tienes no sólo el don de la belleza exterior, sino también el don de tener un interior espectacular. A tu lado es imposible no sentirse feliz. Me dejo envolver por el aura de sensaciones que desprendes y del cual no me acostumbro a separarme. Me haces partícipe de tantos sentimientos que sólo abrazarte a veces no me basta. Contigo es fácil bailar al ritmo de cualquier música, sin importar quién nos observa.

Me encantaría ser tu pareja de baile cada día.




domingo, 3 de mayo de 2015

Día de la madre


Hoy es el día de la madre.

Un día en el que se felicita a la persona más importante de tu vida. La que te ha criado, la que te cuida, la que te mima, la que te defiende, la que te llama, la que se interesa, la que te escucha, la que te ayuda, la que te protege. La que siempre tiene una sonrisa aunque por dentro esté llorando. La que te ha castigado y le ha dolido más que a ti. La que deja de comer para que tú no te quedes con hambre. La que intenta darte todo lo que ella no tuvo. La que siempre está ahí para apoyarte en tus errores y aplaudirte en tus logros. La que nunca mira el reloj cuando la necesitas. La que comparte tus emociones como suyas. La que no necesita una capa para ser un superhéroe. La que daría todo por ti sin pensarlo. La que nunca pide nada a cambio. La que no conoce palabras como sueño, cansancio, enfermedad, tristeza, egoísmo o rencor. La que no sabe decir “ahora no”. La que ha perdonado tus locuras. La que con un beso tuyo se le van todas las penas.

Una persona que cuando la tienes no le das lo que se merece, y cuando te falta se lo darías todo.

Hoy, quien no tenga a su madre cerca, que se mire al pecho y la felicite, pues seguro que aún la lleva en el corazón.

Y quien la tenga, hoy es un buen día para empezar a devolverle todo el cariño que te da cada día.


Felicidades mami.


Te quiero un montón.


miércoles, 22 de abril de 2015

E=MC2




Siempre es importante rodearse de buena gente. En parte, uno es quien es por lo que has aprendido, te han enseñado o te han contagiado. 
Yo tengo la grandísima suerte de haber estado rodeado siempre de gente maravillosa, unos buenos amigos y una familia increíble. Hay gente que entra en tu vida un tiempo, otras entran para quedarse. De todas hay que aprender algo e intentar quedarse con lo bueno. 
Pero de pronto aparece alguien por casualidad, dispuesta a quedarse para siempre, con ganas de enseñarte cosas nuevas. Alguien que te hace sentir tan bien que se te olvidan los problemas. De la que estás deseando aprenderlo todo. Alguien que te hace mejor persona, que te quiere tal cual eres, que te apoya en todo momento, que te hace volver a tener los niveles de autoestima por las nubes. Alguien que consigue hacerte creer que puedes con todo. Alguien que lo da todo sin pedir nada. Alguien que no sólo tiene unos ojos bonitos, sino que su mirada consigue transmitir un universo de sensaciones donde quisieras estar perdido eternamente. Alguien que te da tanto que es imposible devolvérselo. Alguien que hace poco ha entrado en mi mundo y ya forma parte de él.
Alguien a quien atarías a tu cuerpo con cadenas de acero para no dejarla escapar nunca.


Alguien a la que no quiero soltar nunca su mano.

Alguien que es la energía que me mueve.





martes, 14 de abril de 2015

Un mes



Un mes… un espacio de tiempo de duración relativa. Hay meses que se pueden hacer muy largos, y otros pueden pasar en un momento.
Hay  meses increíbles, intensos, emocionantes, repletos de sensaciones. Meses llenos de caricias, de besos, de abrazos. Meses llenos de miradas, de charlas hasta las tantas. Meses de paseos, de fríos y calores, de sol y de lluvia. Meses repletos que te dejan con ganas de más. Meses de confesiones y silencios, de sorpresas sin decepciones. Meses de secretos gritados y de gritos silenciados. Meses con principios y finales. Meses de comer y de ayuno, de engordar y adelgazar, de risas y llantos, de problemas y soluciones. Meses de volar y caminar, de soñar despierto y dormir sin soñar. Meses de velocidades sin correr y de frenos sin querer.


Si todo esto es un mes contigo… no quiero imaginar lo que puede ser una vida a tu lado.

lunes, 13 de abril de 2015

¿Callado se está más guapo?



Hay momentos en los que te gustaría poder decir lo que piensas sin importar las consecuencias. Por suerte (o por desgracia), la parte racional de mi cerebro me lo impide, y me tengo que tragar los malos pensamientos, aún sabiendo que vas a tener una buena indigestión. Pero llegará un día en el que ya no tenga que preocuparme por esas consecuencias. Un día en el que pueda anular esa parte racional y hablar sin tapujos, soltar lo que llevo dentro, y así poder curar esta úlcera que tengo en el alma.
Tengo que dar gracias a la gente que tengo cerca, pues gracias a ellos los malos momentos duran menos y son más llevaderos. Y es que no hay nada como recibir un beso, un abrazo o unas palabras en el momento justo en el que uno las necesita.
Para todo lo demás… mastercard.

¡Gracias!


viernes, 10 de abril de 2015

El fin del mundo



Hoy he soñado que el mundo se acababa. El sol se apagaba, las plantas se marchitaban, los árboles se podrían, los ríos y los mares se secaban, los animales se morían de sed, el aire se volvía irrespirable, las nubes desaparecían, los volcanes explotaban, la atmósfera se hacía densa, los edificios se derrumbaban por los terremotos…


Porque hoy he soñado que tus ojos ya no brillaban cuando me mirabas.

martes, 7 de abril de 2015

Un amor imposible



Él iluminaba los días. Ella las noches.
Un día él se marchó tarde, justo cuando ella llegaba pronto. El encuentro fue increíble, y las consecuencias inevitables. Les llegó el amor sin quererlo y sin posibilidad de disfrutarlo. Nunca podrían estar cerca el uno del otro, aunque lo desearan con todo el corazón.
Aún hoy siguen intentando estar juntos. Hay días que el amor puede más que la naturaleza, y se vuelven a encontrar el tiempo justo para contarse sus sueños… sueños imposibles.
En sus despedidas, él pinta el cielo de impresionantes colores para que ella pueda pasar la noche recordándole.
Hay noches en las que ella está tan feliz que nada le puede quitar esa sonrisa. Otras noches no puede disimular la tristeza de no poder estar a su lado. Incluso hay noches que ni siquiera tiene ganas de salir.
Pero en esos momentos que consiguen hablar, el resultado es increíble; él consigue hacer llegar su luz a los rincones más oscuros… y ella consigue convertir la noche en día.

martes, 31 de marzo de 2015

Historias de Jota. Parte IV


Las ocho de la mañana. Sonó el despertador. Nadie lo apagó.
Jota ya estaba en la ducha. Casi no había pegado ojo en toda la noche e intentaba disimular un poco su cara de cansancio. Se hizo el café, se lo bebió y se fue al trabajo. No podía quitarse de la cabeza, además de a Ariadna, el mail de anoche. ¿Quién lo envió?  ¿Fue ella?
Estuvo repasando durante gran parte de la noche la lista de personas que conocían su historia, y que además supieran que ella estaba aquí. Nadie y a la vez todos eran sospechosos. ¿Quién quería jugar con él a ese juego tan perverso?
El aparcacoches le saludó, pero sólo recibió como respuesta una mirada interrogatoria. Durante su viaje hacia el trabajo se le escapó una pequeña sonrisa al darse cuenta de que el pobre hombrecillo nunca podría tener culpa alguna de su situación actual.
Hoy había atasco en la autopista. Tuvo que dar varias vueltas por la zona para encontrar un aparcamiento. Por fin llegó a la oficina, puntual pero por los pelos. Algo bueno debía tener el no haber dormido casi nada y así haber adelantado su ritual mañanero. Saludó a sus compañeros, como de costumbre, y se dirigió a su mesa. Estaba decidido a descubrir al remitente del mail y no iba a dejar de espiar a todo el mundo, incluso al primer sospechoso de su lista… Ariadna.
El día pasó con más pena que gloria. Trabajo y más trabajo, y sin pistas sobre ese mail. Incluso tuvo que aguantar que un compañero le dijera que se fuera a casa, que no tenía buena cara y seguro que estaba incubando algo. No le volvió a decir nada más en todo el día, seguramente tendría algo que ver la mirada con la que Jota contestó a su compañero.
Hubo unos cuantos intentos de hablar con Ariadna, pero no pudo encontrar el momento entre tanta gente, reuniones y trabajo. También intentó rastrear el mail, pero sin éxito. Quiso repasar la lista de personas que tenían su dirección de mail, pero no hubiera servido de nada y era un listado interminable.
Ni siquiera bajó a media mañana a tomar un café a la cafetería que solía frecuentar. Ya conocía bastante al dueño, y seguro que le hubiera venido bien conversar con él para distraerse y dejar de pensar en todo lo que le estaba sucediendo. El dueño era un hombre mayor, que montó el negocio hacía muchísimos años. Si a eso le sumabas su edad, se convertía en la persona ideal para dar buenos consejos, además de contar unas historias increíbles.
Pensó que tal vez algún día invitaría a Ariadna a tomar algo allí.
Ya era la hora de salir. Estaba terminando de recoger la mesa y apagando el ordenador cuando escuchó una voz detrás suya. Durante un instante pensó que había sido una ilusión, pero al girase allí estaba Ariadna, invitándole a tomar algo si no tenía otro plan.